La educación no es un gasto, es una inversión

La educación no es un gasto, es una inversión.

Con esta frase, repetidas tantas veces en este blog se abría hoy la manifestación contra los recortes en educación que están imponiento las distintas autonomías gobernadas por el PP (de las otras quedan pocas).

Si malos son los recortes y el incremento de horas lectivas que impide realizar otras actividades, mucho peor bajo mi punto de vista, es la campaña de desprestigio que Esperanza Aguirre y otros destacados miembros (y miembras) del PP están lanzando las últimas semanas contra los profesores y contra esa otra categoría de los "interinos" a los que ni siquiera se les concede el status de profesor.

La descalificación de quienes se movilizan contra tanto desmán es de lo más zafio que he visto en los últimos tiempos, y "voto a Dios" que se han visto cosas.  Los que se manifiestan y se movilizan contra tanto atropello son calificados en público y nada menos que por la Presidenta de la Comunidad de Madrid como "perroflautas" o "los de la ceja".  En nuestra Comunidad hemos padecido espisodios de descalificación similares con el anterior Gobierno y las perlas lingüisticas del Sr. Font de Mora o del Sr. Costa fueron casi de la misma calaña. De momento parece que nuestros responsables políticos mantienen las formas bastante mejor. Pero mantener las formas no quiere decir que la esencia política de lo que está pasando en Madrid no sea idéntica a lo que pasará de este lado del Turia. Esperanza Aguirre, como mascarón de proa ideológico actúa por adelantado y los demás, tarde o temprano, acabarán siguiéndola.

El desprestigio de la escuela pública es mucho peor que los recortes económicos, Una escuela poble pero bien valorada mantendría el interes de muchos padres. El desprestigio programado y calculado de la educación pública los hará huir hacia otras opciones. La cesión de suelo para construir colegios provados subvencionados (concertados) forma parte de la estrategia.

La escuela pública, con todos sus defectos, es la única capaz de garantizar la independencia ideológica del profesorado y esta independencia con su diversidad es garantía de formación de ciudadanos con criterio y capaces de elegir. El control ideológico que se ejerce desde las direcciones de colegios concertados, que están en manos de órdenes religiosas incluso de sectas como el OPUS, está garantizado por el control de los contratos (TODOS ELLOS A DEDO) del profesorado. Es cierto que un colegio concertado lo puede montar cualquiera, pero es una verdad incontestable que todos ellos tienen eso que se ha dado en llamar "ideario del centro", que no es más que una colección de consignas que hay que grabar a fuego en las cabecitas de l@s alumn@s. Casualmente una inmensa mayoría de los idearios de centro mantienen posturas muy próximas al partido de la Sra. Aguirre. Curioso ¿no?.

Existe un dicho que asegura que "al enemigo ni agua", todo esto suena a que la estrategia política de esta Sra. es la de "al enemigo ni educación".

Y por si fuera poco se atreve a descalificar las movilizaciones diciendo que son huelgas y manifestaciones políticas (de los de la ceja). Por supuesto que son políticas. Hay que defenderse de este tipo de estrategias que pretenden imponer para la sociedad del futuro una política monocolor....

Rafael Ibáñez